Permite la rotación inmediata del producto, facilita que los compradores puedan elegir, probarse y devolver sus compras como siempre, y pueden hacerlo en los puntos críticos de forma fácil, ágil, segura y eficaz.
Las tiendas no necesitan incorporar más personal ni invertir más tiempo en las operaciones de desinfección, no se ralentiza el ciclo de venta y el cliente puede probarse, comprar y disfrutar con total confianza y seguridad.
Se trata de una cabina cuyo interior aloja tres filas de lámparas de luz UV-C, que dividen el armario en dos compartimentos. Todas las paredes internas están forradas de aluminio para aprovechar el máximo la potencia de los fluorescentes.
Estos compartimentos permiten que el foco de la luz esté a poca distancia de la ropa, aseguran que esta distancia sea siempre la misma, permiten repartir la dosis uniformemente y aprovechar el espacio interior. Se pueden desinfectar simultáneamente dos piezas largas o cuatro piezas pequeñas.